Linux en casa

A los usuarios comunes y corrientes no les gusta preocuparse de configuraciones complicadas, instalaciones de aplicaciones extrañas y todas esas palabrejas raras que normalmente usan los informáticos.

Escuchar la palabra Linux es casi como un sinónimo de extraño, difícil y desconocido. Pues por muchos años realmente lo ha sido, era considerado casi un privilegio único para los técnicos y/o casi maestros de la computación, pero con el avance del tiempo han habido mejoras que lo ponen cada vez más cerca del común de la gente. Así es posible que más gente pueda aprovechar los recursos que nos brinda este sistema, desde toneladas de programas gratuitos para hacer lo que querramos, hasta tener un sistema operativo que es estable y se mantiene libre de virus.

Desde hace más de dos años decidí lanzarme a esta aventura de probar y reprobar hasta aprender, ahora que creo tener un poco más de conocimientos (aún me falta) por lo menos creo que puedo ayudar a facilitar el camino a quienes quieran migrar a Linux como usuarios caseros y aprender a hacer las tareas más comunes a las que estamos acostumbrados.

Espero poder enseñar lo bueno, lo malo y los truquitos del día a día que esté dentro de mi alcance. Desde hoy comienza el diálogo.